Se trata de una escultura que representa a la Biblia y en ella la fe de los inmigrantes alemanes del Volga que sentaron las bases de nuestra ciudad.
Los materiales utilizados para su construcción formaron parte de la cotidianidad de nuestros antepasados, siendo estos los objetos empleados para el trabajo en el campo.
El material -hierro- fue donado por Emilio Schneider de Aldea San Antonio, Walter Nass, Osvaldo Nass y Arturo Bauer de Aldea Santa Celia.
El monumento a La Oma representa el fragmento de una barranca, con una perforación en el centro, por donde una mujer de apariencia añosa, se propone cocinar un bollo de pan.
Inmortaliza la manera en que nuestros antepasados improvisaron una forma para cocinar, cavando un hueco en la tierra barrancosa y prendiendo fuego en su interior.
El monumento a La Oma, simboliza el tesón y el espíritu laborioso de los inmigrantes alemanes del Volga, que enaltecieron a la Argentina que los recibió.